¿Chequeaste el cajero?

Seguro eres de los que no se toman la molestia de revisar el cajero automático antes de utilizarlo.

Es amplia la cantidad de clientes de los distintos bancos que utilizan estos aparatos, y en muchos casos es lo más lejos que pueden llegar a despegarse de su banco.

El Perú sólo representa el 1,5% de e-commerce en la región, y según PayU Latam esto se debe al temor que tienen los usuarios a ingresas su información bancaria para realizar compras por internet, cosa en lo que concuerdan muchas empresas dedicadas a este rubro, es así de simple “el peruano no está acostumbrado a comprar por internet”.

Es muy distinto cuando hablamos de cajeros automáticos, cada vez son menos los usuarios que le temen, si pasan por el Banco de la Nación los días de pago de pensión el número de personas de la tercera edad en la cola es más grande de lo que uno esperaría.

Es hora de que cada uno tome sus precauciones y empecemos a difundir esta cultura de seguridad, a nadie le gustaría que su padre o abuelo sea víctima de estos “clonadores” que terminan dejando sus cuentas bancarias en cero. Y es más frecuente de lo que crees, hace tiempo que paso de moda entre los delincuentes atar el cajero a su 4×4 para robarlo (todavía pasa, vintage).

Un “skimmer” es un dispositivo que escanea la banda magnética de tu tarjeta bancaria, donde se encuentra toda la información de la misma y la almacena en una memoria que luego es sustraída por los delincuentes para utilizar esa información y crear una tarjeta clonada, muchas veces con ayuda de una cámara pueden obtener tu clave secreta, en otras ocasiones basta con mirar por sobre tu hombro. Por eso hay que estar atento, amigo date cuenta. Para mayor ilustración te dejo este vídeo de lo que vienen haciendo en Colombia (hace rato y en todo el mundo, incluyendo Perú), cuya policía metropolitana (algo así como serenazgo) tiene un equipo que se dedica a revisar cajero por cajero desde el año pasado.

Esta tecnología empezó a ser muy utilizada por los delincuentes en nuestro país desde el 2008 (aunque los delincuentes no eran peruanos), expertos en seguridad aseveraban que en los países de procedencia de estos criminales la tecnología usada para fines ilícitos evolucionaba velozmente a diferencia de nuestro país, pero eso se termina en primera instancia cuando cabecillas o miembros de estas organizaciones criminales deciden migrar a países como el nuestro, ahora es tan fácil como mandar un mail con el “manual”.

En el Perú se ha dispuesto que para diciembre del 2014 todas las tarjetas que expidan los bancos cuenten con chip, y para diciembre del 2015 todas estas redes de cajeros cuenten con el sistema de verificación por chip.

Si bien es cierto, actualmente estos famosos chips han sido calificados como “inclonables”, de nada servirá mientras conserven la banda magnética que contiene la información del usuario, y es el problema que enfrenta actualmente Brasil, ahí el sistema de verificación con chip ya se encuentra funcionando, entonces ahora la modalidad ha evolucionado sin necesidad de intervenir el bendito chip, pues al escanear tu banda magnética con el skimmer envían la información a otra parte del mundo para clonar la tarjeta y vaciar las cuentas. No es muy difícil, el delincuente solo tendría que tener a “alguien de confianza” en algún país que aún no haya implementado el sistema de verificación por chip y voilà. Si bien es cierto en Perú ya contamos con tarjetas con chip, la verificación mediante éste aún será obligatoria en los cajeros en diciembre del 2015, así que una tarjeta con chip y banda magnética puede ser clonada y usada en el país en establecimientos y cajeros que no soliciten esta verificación. Como siempre.

Entonces, ¿Cuándo termina esto? Fácil, el día que todo el mundo utilice el sistema de verificación por chip… el problema es que para esas fechas probablemente ese chip ya sea 100% clonable, ojalá que no sea antes de que en el Perú empiece a funcionar.

En conclusión vemos que son casi inútiles los esfuerzos de las autoridades y entidades bancarias por frenar estos fraudes, por eso desde el útero te decimos chequea tu cajero.